Los científicos afirman haber detectado en la Vía Láctea indicios de una tecnología alienígena para generar energía, largamente sospechada, oculta en un tesoro de datos astronómicos.
Estas “esferas de Dyson” hipotéticas son megaestructuras que solo civilizaciones tecnológicamente muy avanzadas podrían construir, y están diseñadas para extraer energía de las estrellas.
Los investigadores afirman haber desarrollado una nueva forma de buscar indicios de generación de energía extraterrestre en un proyecto denominado Hephaistos, que recibe su nombre del dios griego del fuego y la metalurgia.
Para empezar, analizaron los datos recogidos por los sondeos astronómicos Gaia DR3, 2MASS y WISE para detectar candidatas a esferas de Dyson en la Vía Láctea.
“En este estudio, presentamos una búsqueda exhaustiva de esferas de Dyson parciales mediante el análisis de observaciones ópticas e infrarrojas de Gaia, 2MASS y WISE”, escriben los investigadores en un estudio publicado en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society.
A partir de datos procedentes de unos cinco millones de fuentes, los investigadores elaboraron un catálogo de posibles esferas de Dyson.
Buscaron indicios de megaestructuras alienígenas parcialmente terminadas que pudieran emitir un exceso de radiación infrarroja.
“Esta estructura emitiría calor residual en forma de radiación infrarroja media que, además del nivel de acabado de la estructura, dependería de su temperatura efectiva”, explican.
Sin embargo, hay objetos naturales del universo, como los anillos de polvo estelar y las nebulosas, que también pueden emitir esta energía.
De los cinco millones de fuentes de energía analizadas, los investigadores seleccionaron siete como posibles esferas de Dyson.
“Todas las fuentes son claros emisores del infrarrojo medio sin contaminantes claros o firmas que indiquen un origen obvio en el infrarrojo medio”, indican, y añaden que estas fuentes son aún solo candidatas.
De hecho, el exceso de radiación podría proceder de discos de escombros calientes que rodean a estas siete candidatas, incluidas estrellas enanas rojas.
“Encontramos siete enanas M aparentes que muestran un exceso infrarrojo de naturaleza poco clara que es compatible con nuestros modelos de esfera de Dyson”, exponen.
“Definitivamente, se necesitan análisis adicionales para desvelar la verdadera naturaleza de estas fuentes”.