Jorge Lanata y una investigación sobre la vacuna rusa y Mariana De Dios, «los ojos de Cristina» en la operación
El periodista Jorge Lanata presentó en su programa Periodismo Para Todos de este domingo un informe sobre la vacuna rusa Sputnik V enfocado en los riesgos que puede ocasionar en la población al no estar testeada de manera suficiente y la importancia de Cristina Kirchner en el acuerdo con el gobierno ruso.
Con testimonios de especialistas, científicos e infectólogos, el informe mostró que «no hay evidencias de que la vacuna sea segura y eficaz». Explicaron que según protocolos rusos, la fase 3 estaría completa recién a fines de abril, una situación que contrasta con lo informado por el gobierno argentino, que señaló que estaría en el país disponible a fines de diciembre.
«El arreglo con Rusia es un triunfo de Cristina ¿Seremos conejillos de indias detrás de un negocio K?», se preguntó el periodista.
Ante esto explicó que en realidad Alberto Fernández tenía un acuerdo con Oxford, que está en proceso de generar la vacuna conocida como AstraZeneca: «Pero Cristina tenía un plan distinto», agregó el conductor.
En el informe contaron que una de las funcionarias que viajó a Rusia para cerrar el acuerdo fue Mariana de Dios, quien lo hizo en condición de «empresaria», pero que en realidad se trata de una funcionaria del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires.
La mujer es hija de Ángel De Dios, uno de los gestores de los famosos fondos de Santa Cruz que manejaba Néstor Kirchner. Además, su hermano, Rodrigo De Dios, es hoy el número dos de la Aduana, un organismo controlado por el kirchnerismo.
Ante estas relaciones muchos consideran a Mariana de Dios como como «los ojos de Cristina» en el viaje a Rusia. Y que cumplió una función clave en el acuerdo que cerraron los dos gobiernos.
Tiene una empresa de tecnología que procesa recetas y órdenes médicas llamada Traditum y otra llamada Suministros y Equipamientos Médicos SRL. Esta última está en proceso de salida de la quiebra y mantiene irregularidades en el Banco Central.
Al mismo tiempo en el informe sumaron testimonios de médicos rusos que se negaron a vacunarse con la Sputnik V.
Segun encuesta de la Universidad de Belgrano, el 40 por ciento de los argentinos no se aplicaría la vacuna rusa por temor.
Dudas en Rusia por efectos a largo plazo
María Khudyakova, periodista rusa, informó para Periodismo para Todos que la vacuna Sputnik está a disposición del personal que está en zona de riesgo en Rusia, es decir los médicos, policías y profesores quienes ya tienen la opción de aplicársela de forma voluntaria. Sin embargo hay incertidumbre en Rusia sobre qué efectos puede causar a largo plazo.
Artyom Rybalchenko es médico infectólogo ruso. Aseguró: «Antes de que empezara la segunda ola, a los médicos que planteaban trabajar con pacientes con coronavirus les propusieron vacunarse contra el covid. Hubo algunos que se vacunaron y otros no lo hicimos».
Continuó: «Quienes se vacunaron no tuvieron ningún tipo de efectos secundarios. Es decir que algunos tuvieron un pequeño malestar por un par de días pero en general esto no afectaba su trabajo».
El profesional explicó que en la primera dosis, la vacuna prepara al sistema inmune y da paso a recibir finalmente la segunda dosis que es la última y la cual hace que se forme la inmunidad. Esa inmunidad -agregó- se produce a las dos semanas de haber recibido la última aplicación.
Pero aclaró: «Hablando de efectos secundarios a largo plazo, todos sabemos que la vacuna no ha sido del todo testeada y no sabemos los efectos secundarios que podría causar a largo plazo. Por lo tanto, lo que sucederá en el futuro lo evidenciará el tiempo».
Un periodista de RT, Martín Álvarez, se presentó como voluntario para aplicarse la vacuna rusa. A través de informes audiovisuales -que se replicaron en PPT- el periodista fue mostrando los pasos protocolares de la aplicación. 12 horas después de recibir la primera dosis, mostró que tuvo 38 de fiebre.
A las 24 horas, Álvarez ya se encontraba mejor, con fiebre más baja (37.5°). Explicó: «Me dijeron que los síntomas se enmarcan en la típica reacción del sistema inmunológica a la vacuna».
Fuente: CLARIN